Fotografías

       Estas fotografías , en su mayoría han sido tomadas por el mismo Paulino Iriarte. Nos parecen interesantes porque además de testimoniar momentos de vida y entorno familiar, reflejan su particular mirada tanto en la composición como en la elección de personajes y escenarios mendocinos.

Familia: Paulino, Margarita, Eduardo y Jorge



Margarita y Eduardo, 1949



De un paseo familiar , 1942




 

Margarita, Jorge, Choli.

Eduardo y monito



 

Hijos y sobrinos, en Mendoza



Margarita e hijos, en el Rosedal, Parque Gral San Martín, 1936

En Chile, con su esposa Margarita Mansilla, 1934.

Paulino Iriarte, al centro, en diario "Los Andes"

Margarita ,  Eduardo y Jorge , en algún lugar de Mendoza , 1941.

Margarita e hijos en el Parque Aborigen , Mendoza





Obsequio de  su amigo  Paul Foujita en 1932 . Estaba en su taller.

Su hijo mayor, Eduardo, vestido de gaucho. Estudio para un cuadro.

Estancia "El Plata", sin fecha 



Estancia "El Plata", sin fecha.



Estancia "Escondida", sin fecha.



Estancia "El Plata" , sin fecha.

Familia, montaña, sin fecha.



Puesto "Navico", sin fecha.

Familia bonaerense en Villavicencio, sin fecha.









Los cuadros de género : escenas populares

Transcripto del artículo de la Profesora Mirta Scokin de Portnoy , "La pintura de Historia en Mendoza: Paulino Iriarte". En: Cuadernos de Historia del Arte nº 11, UNCuyo, 1972.

  (...) Aunque le hayamos dado gran importancia a la pintura de Historia, encontramos también en la obra de Iriarte , cuadros de género, y entre ellos, cuadros populares. Como sabemos, la pintura de tipos populares responde al cultivo del sentimiento nacional, al  que se une un cierto pintoresquismo. Advertimos que tanto en la pintura de historia como en sus cuadros populares hay un denominador común: lo argentino. La tradición, nuestro pasado, lo criollo enviaron a la sensibilidad del artista sus resonancias. Quiere ser argentino y lo es sobre todo cuando pinta.
       Pero investiguemos un poco en la juventud de Paulino Iriarte, los años en España, sus maestros: él menciona a José María López Mezquita, a Emilio Cía, a Valentín Zubiaurre. En todos ellos hay una unidad: su   amor por lo nativo. José María López Mezquita fue un pintor de género nacido en Granada en 1883. Sufrió la influencia de Zuloaga quien pintó con preferencia tipos y paisajes de su tierra con un sentido romántico de lo castizo. Valentín de Zubiaurre, hermano de Ramón, nació en Madrid en 1879. Al igual que en el caso anterior su principal interés radicó en  la pintura de los tipos populares vascos y castellanos.
      Paulino Iriarte ha realizado dentro de este género óleos y  acuarelas, pero la obra que más nos interesó fue un cuadro que vimos en su taller que él tituló "El juego de Truco" . Se trata de un óleo de entonaciones bajas, de fondo oscuro con efectos claros y de color en las ropas de los jugadores.Sus rostros están iluminados por una luz artificial que surge del centro de la mesa. Son cuatro paisanos, sentados junto a una mesa y otros de pie observando el juego. En primer plano uno de espaldas al espectador y el otro de perfil mirando como con recelo. En segundo plano vemos dos jugadores sentados, uno de perfil iluminado está a la espectativa y el otro de frente, con un cigarro en los labios mira guiñando un ojo al compañero. En último plano, de pie, tres paisanos observando el juego. El artista ha realizado en esta obra, observación de estados psicológicos, estudios de carácter, en fin, creemos estar frente a una obra lograda. Tanto la composición de este cuadro, como el tema, nos hizo traer a nuestra mente el recuerdo de otro pintor argentino cuya obra es un testimonio de la vida ciudadana: nos referimos a Pío Collivadino y especialmente a su cuadro "El truco". Aquí se trata de gauchos jugadores de truco sentados junto a una mesa de pino , y gauchos mirones de pie.
     
          Quien se detenga a considerar la labor de Paulino Iriarte advertirá modos expresivos no modificados por ningún "ismo" de última hora. Cultivó nuestro pintor el realismo histórico, en tanto que ha recreado en su obra la realidad de la vida popular, hombres y hechos del pasado que marcaron rumbos en el desarrollo y proceso del país. Esta corriente tuvo en Argentina importantes cultivadores como el pintor de batallas , Fernández Villanueva y más tarde Antonio Alice."

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La pintura de Historia de Paulino Iriarte

Transcripto del artículo de la Profesora  Mirta Scokin de Portnoy "La pintura de Historia en Mendoza : Paulino Iriarte"  (Cuadernos de Historia del Arte nº 11 , UNCuyo, 1972.)


"(...) Todo lo que diremos de él  ha surgido de la observación directa de su obra y de varias entrevistas personales, de las cuales nos ha llamado la atención su modestia, su amabilidad y sencillez.(...).
        A diferencia de muchos otros artistas , Paulino Iriarte está aislado. Se formó lejos de su patria y ya en ella, diversas causas le impidieron hacer de su vocación un medio de vida. Sin embargo, el artista no dejó de expresarse, pues Mendoza y su majestuosa cordillera hicieron vibrar en su alma nuestro glorioso pasado histórico. Por eso, lo más rescatable de su obra pictórica son los cuadros de historia.
       La realización de un cuadro de historia exige un gran dominio del dibujo, de la entonación, de la perspectiva y de una controlada dosis de imaginación. Creemos que "La Maestranza" , un óleo de grandes dimensiones (1,30m x 0,93 m), reúne las cualidades antes anotadas. El tema de esta obra , expuesta en el sencillo taller del pintor, es la preparación del Ejército LIbertador en Plumerillo. En primer plano, musculosos hombres trabajando sobre el yunque, desnudos los torsos, seguramente por el calor que provoca el horno candente en segundo plano. Esta visión nos recuerda el tema de "La Fragua" del genial Velázquez. También en segundo plano, y a la izquierda del espectador, aparecen San Martín ataviado con poncho y discutiendo los planes con Fray Luis Beltrán. Hay un tercer plano de obreros trabajando junto a otro horno más pequeño y otro de paisaje cordillerano apenas esbozado a través de la única puerta que tiene el recinto. La luz del cuadro penetra por esta puerta e ilumina la mitad del óleo, la otra mitad está iluminada por la luz artificial que provocan las llamas del horno a la derecha. Seguramente esta obra cumple la doble misión que tiene todo cuadro de historia: la calidad pictórica y la fidelidad arqueológica.
        Siempre inspirado en el pasado, quiso Paulino Iriarte realizar un retrato del gestor de toda la epopeya: el del "General  Don José de San Martín estudiando el cruce de Los Andes".Es un cuadro de composición , a la derecha el jefe del ejército está de pie, colocado tres cuartos de perfil, detrás de una mesa, en la cual se observan elementos de trabajo que indican su preocupación por la empresa.El rostro de San Martín está tomado del ya conocido, atribuido a la hija del prócer. El artista ha puesto como fondo una cortina de un rojo violento y un paisaje cordillerano. En la interpretación de Iriarte, el color refleja el carácter del retrato. Así nos explica que el rojo fue el color de los dignatarios y del señorío.
        Nuestro artista, conocedor de nuestro pasado nacional, siente un profundo reconocimiento por los héroes que han luchado por nuestra Patria. Por ello pensó rendirles su reconocimiento dentro de sus posibilidades y alcances artísticos. Nació así una galería de veinticuatro óleos, muchos de ellos con gran acierto por el dominio del dibujo, la penetración psicológica y la entonación. Se trata de bustos sin manos con el tema único de la cabeza, de tamaño próximo al natural. Las hay de frente, de tres cuartos y de perfil. La dimensión de estos óleos es uniforme (0,55m x 0,40m).
        Observando esta serie de retratos hay algo en ellos que es interesante destacar, y es que no hay monotonía en el conjunto, por el contrario, hay en estos cartones positiva variedad.Paulino Iriarte no repite sus cuadros, no hay una fórmula única, tanto por las interpretaciones , como por la posición , los estudios psicológicos, el color y la entonación. Los fondos a veces son neutros , pero otros son verdes, azules , rojos, grises, de acuerdo al temperamento del  retratado. Para realizar los fondos el artista ha utilizado la espátula, sin embargo los rostros están hechos con pincel, pues como sabemos con él puede lograr los detalles más finos, sobre todo,  tratándose de retratos. El material empleado es un cartón de celotex , preparado antes a la tiza y cola.
          Detengámonos, por ejemplo, en el retrato que nuestro pintor realizara del "General Gregorio Aráoz de Lamadrid". El cuadro de fondo en tonos grises representa la cabeza del prócer , tres cuartos de perfil, mirando a la derecha; ataviado con traje militar azul, adornado con charreteras doradas. Se trata de un óleo de gran acierto, en donde el artista ha sabido respetar el misterio de su alma y la fuerza de su carácter, pero también hay una armonía en el manejo del color y de la luz.
         Otra buena interpretación es la realizada en el retrato del "General Juan Lavalle" . Aquí el artista ha colocado la cabeza tres cuartos de perfil sobre un fondo ocre. Su traje militar está cruzado a la altura del pecho por la banda argentina. Es un Lavalle de cabellos y barba rubios. En su rostro dominan sus ojos de un intenso celeste que miran con tristeza.
         El "General Gerónimo Espejo", otro guerrero de la independencia, formó también parte de la epopeya sanmartiniana y como tal, se suma a los héroes de esta galería. Resulta curiosa la interpretación que realizó del General Espejo, pues la mayoría de los retratos que existen lo representan en edad madura, en cambio, Paulino Iriarte quiso ser fiel y representarlo tal cual era por aquellos años de lucha junto al General San Martín.Se trata de un General Espejo rejuvenecido , colocado tres cuartos de perfil, destacándose su cabeza en un fondo neutro sobre bases de verde. Como todos viste el consabido traje militar. Paulino Iriarte ha realizado en esta obra una sólida construcción del rostro y una interpretación más humanizada de este militar de mirar meditativo.
       "Juan Thomond O' Brien" es otro de los retratos de esta galería. La cabeza tres cuartos de perfil se destaca sobre un fondo gris azulado y blanco. Lleva sobre su pecho una banda roja y en su rostro se destacan sus ojos celestes. El artista ha logrado en este retrato la expresión de lo arquetípico, pues no se trata solamente de un retrato psicológico individual, sino de una representación de lo eminentemente característico de un tipo humano: el militar.
        Muy pronto podremos ver estos cuadros en una sala de la Junta de Estudios Históricos de Mendoza, más los restantes que componen la serie , sobre los cuales desgraciadamente no podemos detenernos: Bernardo de O'Higgins, Gregorio Las Heras, Tomás Guido, Rudecindo Alvarado, José Álvarez Condarco, Guillermo Miller, Juan Pascual Pringles , Miguel Soler, Mariano Balcarce, Francisco Cramer, Félix Bogado, Mariano Necochea, José Antonio Álvarez de Arenales, Francisco Zelada, Mariano Olazábal, Hilarión de la Quintana, José María Zapiola, Francisco Díaz, Enrique Martínez y Fray Luis Beltrán. Paulino Iriarte concreta así su deseo de reunir los próceres de la independencia en una sola colección, según consta en la nota biográfica que luego transcribimos.
         En la Junta de Estudios Históricos de Mendoza, se guardan varios retratos de Paulino Iriarte. En primer término el retrato del fundador de Mendoza, Don Pedro del Castillo, además el retrato de Angelino Arenas, del Teniente Coronel José Tomás Cano, del Ex Gobernador Jacinto Álvarez, de Manuel Belgrano. De estos cuadros, el que más se destaca es el de "Pedro del Castillo". Se trata de un lienzo de grandes dimensiones; el castellano se encuentra de pie, ataviado a la usanza de la época con un fondo de cordillera. La parte inferior del óleo está realizado en entonaciones bajas, sin embargo la parte superior se ilumina con el rostro del conquistador, el brillo de su coraza y el paisaje cordillerano. Las condiciones psíquicas de Pedro del Castillo pueden aceptarse según la concepción de Paulino Iriarte.(...)

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Biografía dada por el artista

       Los siguientes datos fueron tomados del artículo de la Profesora Mirta Scokin de Portnoy, "La pintura de Historia en Mendoza". En:  Cuadernos de Historia del Arte Nº11, UNCuyo , 1972.


       Paulino Iriarte Balda , nacido el 23 de julio de 1899 en Buenos Aires.

       "En  1911 me llevaron a España, donde comencé mis estudios secundarios y al mismo tiempo el Profesorado de Dibujo en la Real Academia de Bellas Artes de San Sebastián (playa de mar sobre el Cantábrico).
       Desde muy pequeño tuve mucha afición por el dibujo y las artes plásticas.Me extasiaba ante los cuadros de los grandes pintores como Rubens, Velázquez, Pradilla, Murillo, Tiziano, Rembrandt y muchos otros.
       Tenía y tengo predilección por el arte clásico y el moderno de Zuloaga, Sorolla, Quirós, Fader y otros que me deleitaron con su pintura.
        Mis maestros de pintura fueron los españoles Don Emilio Cía, José María López Mezquita y Valentín Zubiaurre, quienes me tenían mucha estima por la pasión que sentía por el arte. Mucho añoré aquellos años de mi juventud, donde no pensaba más que en la pintura.
        Cuando regresé en 1918, ya no podía hacer lo que me gustaba y tuve que aprender nuevas formas de arte publicitario, porque ese era arte positivo, dentro del ritmo moderno y utilitario. Las pinturas al óleo eran de muy escasa venta, sobre todo cuando uno no es conocido en el ambiente artístico. El tiempo y la perseverancia, me dieron la primera oportunidad pintando el retrato de la señora Isabel Álvarez de Lowensteing. Dicha dama me presentó a sus amistades, logrando concretar otros trabajos que me encarrilaron por la senda conveniente.
       Pinté el retrato del Dr. Juan Francisco Torrent, Diputado Nacional por Corrientes, que después llegó a ser Gobernador de su provincia.Otro retrato de Don Alberto Barceló y de su señora esposa, caudillo político de la ciudad de Avellaneda, colindante con Buenos Aires. Después me tocó pintar al doctor Miguel Sussini, Presidente de la Cámara de Diputados de la Nación.
       En 1929 expuse mis obras en el Salón del París Hotel de la Avenida de Mayo, pero con relativo resultado. Para entonces, una afección reumática comenzó a molestarme y como iba en aumento fui preparando mis asuntos, para alejarme de Buenos Aires. Aclimatado al ambiente europeo, me era difícil soportar la humedad de la capital, y el 7 de febrero de 1934, partí con destino a Santiago de Chile. Me había entusiasmado un amigo hablándome de esa ciudad, pero no era fácil llegar al medio necesario para mis actividades. Después de permanecer dos meses, con muchas promesas, pero poco efectivas, decidí regresar. Debo manifestar que de paso por Mendoza había encontrado el clima que me convenía y un ambiente social que se mostraba propicio para mis actividades. Así que me radiqué aquí y habría de ser para siempre. Aquí nacieron mis hijos y mis nietos.
         Encontré buena acogida en todas partes, como corresponde al carácter noble de la gente de esta tierra. En el diario "Los Andes" me brindaron amplia colaboración, realizando el primer suplemento en retrograbado publicado. Al mismo tiempo tuve trabajos de los talleres gráficos de la ciudad como Peuser, Artes Gráficas Flores y otros.
         Al año siguiente se me ofreció ingresar en la Dirección de Obras Públicas de la Municipalidad de la Capital (Mendoza) como dibujante proyectista, para ocupar posteriormente el cargo de Jefe de Dibujo. Grandes cambios sucedieron con el transcurso de los años, y en 1944 la Oficina quedó acéfala de arquitectos, por lo cual quedé con la gran responsabilidad de proyectar todas las obras que se fueron solicitando. Citaré las más importantes: edificio de Plaza de Ejercicios Físicos ubicado en Paso de Los Andes y Sobremonte, Baños Públicos y Termales de Avenida Vicente Zapata y San Juan, Teatro al aire libre "Gabriela Mistral" en el Parque O'Higgins, remodelación de las plazas España, Italia , Chile y Plazoleta Vergara. Realización de las plazas Hipólito Irigoyen, Libertad, plazoleta Fader, Francia y Caseros y el Panteón Municipal en el Cementerio de la Capital. En el orden privado proyecté y  realicé numerosas obras, siendo las más importantes , el edificio de la Liga Mendocina de Fútbol en la calle Garibaldi y transformación de la Capilla de Nuestra Señora de Lourdes en la Iglesia del Challao. También el escenario para la Fiesta de la Vendimia de la Provincia, encargado por el  Ministro de Obras Públicas (actual miembro de la Junta de Estudios Históricos) Don Jorge I. Segura. Todos los escenarios de la Vendimia y carrozas alegóricas vendimiales entre los años 1941 y 1960 de la Municipalidad de la Capital.
      Volviendo a la pintura, realicé varios óleos que paso a detallar. Para la Junta de Estudios Históricos: Don Pedro del Castillo, fundador de Mendoza, Teniente Coronel José Tomás Cano, del ejército Libertador, General don Manuel Belgrano, don Tiburcio Benegas, Gobernador de la Provincia y pionero de la vitivinicultura en Mendoza, de don Jacinto Álvarez, Gobernador de Mendoza, hermano mellizo de don Agustín Álvarez, de don Pedro Arenas, pionero que trazó el camino a Chile en el siglo XVIII, de don Angelino Arenad, pionero de la vitivinicultura. Finalmente, y llegando a la últma etapa, queriendo dejar a esta tierra amada un recuerdo del agradecimiento que siento por todo lo que me dio, realicé una reconstrucción de todos los retratos de los próceres del Ejército Libertador, junto al Gran Capitán de Los Andes, el General don José de San Martín. Era una deuda que tenía prometida en nombre de mis hijos y mis nietos, que son mendocinos, para que sientan a su vez agradecimiento por los héroes que nos dieron una Patria libre y soberana. He realizado esta galería para reunirlos en un solo ambiente, ya que no hay en el país otro lugar donde puedan contemplarse todos juntos, los esforzados paladines que lucharon hombro a hombro para vencer o morir por la noble causa. Son veinticuatro retratos que me honro en donar a la Honorable Junta de Estudios Históricos de Mendoza.
                                                                             
                                                                                                                      Paulino Iriarte"